El debate sobre la violencia de género se ha abierto una vez más, después de que 4 mujeres fueran asesinadas esta semana.
Varias asociaciones han manifestado que los jueces aplican la Ley Integral contra violencia de Género de forma incompleta y que muchas veces las mujeres son obligadas a declarar en los tribunales como si fueran ellas las culpables y no las víctimas. Por eso, argumentan, no todas las mujeres denuncian. El Observatorio contra la Violencia de Género se defiende. Su portavoz ha dicho que es una irresponsailidad acusar a los jueces de los asesinatos.
Más allá de este cruce de acusaciones, me interesa el debate abierto en los propios medios (en algunos medios) sobre cómo abordar este asunto.
Fenando González Urbaneja contaba hace unos días cómo trata la BBC la violencia machista.
Es un modo correcto de hacer las cosas. Muy british.
Yo por mi parte me apunto a la definición que dio Ana María Pérez, presidenta de la Federación de Asociaciones de Mujeres Divorciadas y Separadas. Para ella, esto no es maltrato, agresión o violencia machista. Es terrorismo de género. Así de claro.
Me parece una buena iniciativa informar de estos asesinatos como si se tratara de terrorismo. Quizá no sea del todo correcto, pero al menos lograríamos concienciar a la población. Muy pocos están a favor del terrorismo; si los agresores y maltratadores se ven equiparados a los etaras quizá se lo piensen dos veces antes de clavar un cuchillo a su novias y esposas.
Imaginemos las siguientes noticias:
Intolerable, ¿verdad? Pues así informamos los medios de la violencia doméstica. Las mujeres "mueren a manos de"; no son asesinadas. Los asesinos siempre son "presuntos"; aunque confiesen en el acto. Los asesinatos no se toman en conjunto (a no ser que haya 4 muertas en un día). Y los asesinos no tienen nombre.
Además, estos asesinatos se colocan siempre en Sociedad (Tendencias en La Vanguardia, Vida y Artes en El País), junto a reportajes sobre internet o entrevistas a filósofos. En televisión, se dan bajo el epígrafe de sucesos. Y no debe ser así.
En 1980 hubo 99 asesinatos de ETA; fue el peor año. En 2007, 74 mujeres fueron asesinadas por sus parejas o ex parejas. 1980 se recuerda como el peor año en la democracia; las asesinadas en 2007 no pasarán a la historia.
Público ha elaborado un decálogo para tratar el tema. Es un comienzo.
Varias asociaciones han manifestado que los jueces aplican la Ley Integral contra violencia de Género de forma incompleta y que muchas veces las mujeres son obligadas a declarar en los tribunales como si fueran ellas las culpables y no las víctimas. Por eso, argumentan, no todas las mujeres denuncian. El Observatorio contra la Violencia de Género se defiende. Su portavoz ha dicho que es una irresponsailidad acusar a los jueces de los asesinatos.
Más allá de este cruce de acusaciones, me interesa el debate abierto en los propios medios (en algunos medios) sobre cómo abordar este asunto.
Fenando González Urbaneja contaba hace unos días cómo trata la BBC la violencia machista.
Hace unos días pregunté al responsable editorial de la BBC como se planteaban ellos este tema. Mostró sorpresa, no se lo plantean, su libro de estilo no dice nada, propone que como los demás temas, con seriedad, con las reglas básicas
Es un modo correcto de hacer las cosas. Muy british.
Yo por mi parte me apunto a la definición que dio Ana María Pérez, presidenta de la Federación de Asociaciones de Mujeres Divorciadas y Separadas. Para ella, esto no es maltrato, agresión o violencia machista. Es terrorismo de género. Así de claro.
Me parece una buena iniciativa informar de estos asesinatos como si se tratara de terrorismo. Quizá no sea del todo correcto, pero al menos lograríamos concienciar a la población. Muy pocos están a favor del terrorismo; si los agresores y maltratadores se ven equiparados a los etaras quizá se lo piensen dos veces antes de clavar un cuchillo a su novias y esposas.
Imaginemos las siguientes noticias:
- Un hombre ha muerto en Madrid. La víctima, F.T.V., era juez y recibió varios disparos en su despacho de la Universidad Autónoma de Madrid. Se sospecha que un ciudadano vasco fue el autor del homicidio.
- Explota un coche explota en Madrid. La deflagración afecta a varios edificios y deja 2 personas heridas. A falta de pruebas se sospecha de un ciudadano vasco.
- Presuntamente, ETA asesinó a Miguel Ángel blanco. La organización vasca se ha autoinculpado del asesinato en una nota de prensa.
Intolerable, ¿verdad? Pues así informamos los medios de la violencia doméstica. Las mujeres "mueren a manos de"; no son asesinadas. Los asesinos siempre son "presuntos"; aunque confiesen en el acto. Los asesinatos no se toman en conjunto (a no ser que haya 4 muertas en un día). Y los asesinos no tienen nombre.
Además, estos asesinatos se colocan siempre en Sociedad (Tendencias en La Vanguardia, Vida y Artes en El País), junto a reportajes sobre internet o entrevistas a filósofos. En televisión, se dan bajo el epígrafe de sucesos. Y no debe ser así.
En 1980 hubo 99 asesinatos de ETA; fue el peor año. En 2007, 74 mujeres fueron asesinadas por sus parejas o ex parejas. 1980 se recuerda como el peor año en la democracia; las asesinadas en 2007 no pasarán a la historia.
Público ha elaborado un decálogo para tratar el tema. Es un comienzo.